[¿Hay señal?]




[Still lost]

8.6.19

#VeranoDel19

Siento que ha pasado mucho tiempo desde que me fui. Me he distraído y he viajado por varios planetas, con sus diversos sentimientos particulares. Han sido unos cuantos meses desde que no paso por aquí que. Dentro de esta dimensión y este [Pasillo 8], se pueden traducir como años luz.
Me distraigo constantemente, Javier. Camino de un lado y a veces se me olvida a dónde quería llegar.
¿Era a la derecha o a la izquierda? ¿Me paraba aquí o más adelante?, esas son preguntas constantes durante mis viajes.
Pierdo combustible en mi nave sin dirección. O me quedo como Luis Alejandro Vasco, en una balsa a la deriva [Relato de un náufrago, de Gabriel García Márquez]. Solo me acompañan mis pensamientos intraducibles y la sensación de este solipsismo en el espacio, en la experiencia de vida única que tendré. Supongo que, al sentirnos solos, estamos acompañados en experimentar la soledad o las confusiones que esto podría traer.
No me molesta mucho perderme, a decir verdad. Excepto las ocasiones en las que tengo prisa o necesito llegar a tal o cual lugar.  Ahí sí mi perspectiva, sobre esto, cambia dramáticamente un poco.
Perderse no está del todo mal [excepto cuando tu despiste te lleva al puente del Teodoro Moscoso en más de una ocasión]. El otro día iba caminando por un paseo con vista al mar. No se me olvidó a donde iba, pero escondí el reloj que me apuraba y me senté en el muro para observar las olas que iban y venían. Ya estaba llegando la noche y también podía ver la luna. No pensé en mucho, solo en ese momento tan mío, tan esporádico.
Continúe mi camino luego. Y así he seguido con otros escenarios y otros pasillos. He caminado por lugares donde se desata la furia y se eleva un reclamo histórico colectivo [tiempos estos para estar vivos]. He visto la compasión de cerca y el egoísmo también. Me he confundido con algunas cosas y otras las he entendido mejor.
He aprendido que falta desaprender y volver a aprender. He visto tanto y tan poco al mismo tiempo. ¡Cuánta contradicción!

Pero ha sido un viaje interesante, un viaje que quiero continuar para hablarte más. Ya te contaré más.
Y finalmente, aterrizo aquí nuevamente. ¿Cómo está tu mundo, Javier? ¿Cómo está el mundo de los otros lectores que pasan por aquí? ¿Se han perdido estos días? ¿Se sienten solos? ¿Qué piensan cuando ven el mar?

¿Hay señal?


Isabel


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En alguna ocasión leí un cuento que afirmaba que una taza solo sirve cuando está vacía. ¿Por qué no se me habrá ocurrido a mí? [jaja] Si lo piensas, es cierto. Si la taza está llena no puedes utilizarla para echar algo más en ella, porque, obviamente, se desborda. Así que es necesario estar dispuestos a vaciar la taza, igual que el aprendizaje. La mejor forma de aprender es dando por sentado que en algún momento eso que sabíamos debe ser reemplazado…. No es bueno tomarse un café que se sirvió hace mucho… y ahora está frío como lengua de muerto. Como le decía a mi madre los otros días, la naturaleza de las cosas es el cambio. Tal vez tus extravíos son parte de esos cambios o simplemente son parte de tu naturaleza. Sin importar la respuesta, y es la ventaja de tener pasillos como estos, desde cualquier recóndito lugar se puede enviar esa señal de vida. Tal vez tarde un poco en llegar, por eso de los ecos interestelares que suelen hacer que la información vaya a otras galaxias primero, pero siempre llega porque se sabe todos los caminos.  Ciertamente estamos vivos en los cambios, en las revoluciones que el pueblo llevó acabo, lo raro es que no nos hayamos encontrado…. ¿Pero ves?…. Había demasiados universos en un solo espacio, así que naufragamos de otro modo.

  ¿Qué hay de este lado del universo? Últimamente un pensamiento recurrente: “no nos vemos”. No nos refiero a nosotros, que también hace mucho que físicamente no te veo, me refiero a que la gente se ha acostumbrado a verte de paso.  A veces te sientas frente a frente con una persona y esta no te ve. Y me parece que se debe a que nunca nadie les enseñó a mirar de verdad.  ¿Cuánta gente te ha mirado a ti útilmente? ¿Quién te ha visto de verdad? Descarta a todas las cuyas primeras preguntas fueron: ¿Cómo te va en los estudios? ¿en el trabajo? ¿tienes novio? También descarta a todos aquellos que te preguntaron ¿cómo estás? Tu respondiste –bien- y se conformaron con esa respuesta.  Creo que mucha gente jamás va a notar que nos perdemos, porque no nos ven de verdad. No miran para adentro, hacia el alma de uno. Corrijo.  Tal vez, no es que nos perdemos, es que a los lugares a los que llegamos no hay nadie, o muy poca gente. [Eso no incluye pasar por el Teodoro Moscoso…. Jaja eso ya es otro asunto].

    Al igual que tú, aterrizo en este espacio, que es también plataforma de despegue. Dejo una pequeña marca en un muro, como si fuese la bitácora de viaje de un cavernícola a veces un poco salvaje, para que todos sepan que estuve por aquí, me voy sin despedirme porque pienso volver.

¿Hay señal?  Yo digo que sí...

Hasta el próximo eclipse.

Javier







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